La totalidad de la superficie de Navas del Madroño está ocupada por suelos granític0s pertenecientes al borde oriental del batolito de Cabeza de Araya, que se eleva suavemente sobre los materiales precámbricos del complejo Esquisto Grauváquico, formando la mayor parte de la amplia penillanura cacereña. Además, el término se encuentra atravesado por la gran fractura del río Araya, elemento que definirá el paisaje que nos encontraremos en esta ruta, el Camino Viejo de la Ermita, o también conocido como Camino de los Romeros, que va desde el pueblo hasta la ermita de Santo Domingo de Guzmán, su patrón.
Tomando la Plaza Mayor como punto de partida, la ruta se encamina hacia la ribera del Araya entre un paisaje dominado por el granito y los terrenos arenosos, donde la vegetación va desapareciendo progresivamente, extendiéndose los pastizales y los retamares en el cauce del Araya. Descendemos al río siguiendo el arroyo del Almendro por una pista de novísima creación, para posteriormente ascender suavemente hasta la ermita de Santo Domingo de Guzmán, situada en un marco incomparable, la Sierra de Santo Domingo. Aunque la ruta acaba aquí, el lugar apartado invita a explorar sitios cercanos como la Huerta del Bola, el arroyo del Guirigay o la propia Sierra de Santo Domingo, subiendo hasta el vértice geodésico del Pasto Común.